viernes, 30 de diciembre de 2011

Lo mejor de 2011: Mis experiencias

En este año 2011 han pasado muchísimas cosas. El Barça ha ganado cinco títulos, todos menos el que ganó el Real Madrid. Casillas ya es el jugador con más partidos en la historia de la selección y Villa, el máximo goleador. El Oporto fue campeón de un triplete histórico. Forlán y Suárez dieron a Uruguay su 15º Copa América. El Santos de Neymar levantó la Libertadores. Equipos como Dortmund o Lille volvieron a triunfar en sus países. La selección española sub 21 y sub 19 lograron su correspondiente Europeo.


Además, Rafa Nadal volvió a ganar Roland Garrós, aunque perdió el número uno en detrimento de un gran Novak Djokovic. Fernando Alonso acabó cuarto en el Mundial de Formula uno. La selección española de Baloncesto se alzó con un nuevo título, el Eurobasket. En motos, Nico Terol logró el título de campeón en 125cc. Alberto Contador demostró una casta y esfuerzo impresionantes para ganar el Giro de Italia y luchar hasta el final por el Tour. La Copa Davis también fue para casa, con grandes actuaciones de Ferrer y Nadal. Verónica Boquete fue MVP en la mejor liga femenina del mundo, la WPS estadounidense.


También hubieron tragedias. Muertes como la de Simoncelli, Frazier o el gran Severiano Ballesteros, los casos de Marta Domínguez y el propio Contador, el cierre patronal de la NBA a comienzo de temporada, los descensos por impagos de muchos equipos de Segunda B...

Pero sin duda, para mi lo mejor de 2011 han sido mis propias experiencias con el mundo del deporte este año. El destino quiso que Raúl González, el jugador al que más admiro y venero, pisara España de nuevo con su actual equipo, el Schalke 04, dándome la oportunidad de volver a verlo en directo. En Mestalla, en octavos de Champions y contra un Valencia comandado por una afición antimadridista, Raúl marcó un gol decisivo para eliminar a los ché, para callar bocas y, por supuesto, para dedicarlo a mis compañeros y a mi en la grada colindante. Otra experiencia fue visitar la catedral del fútbol, San Mamés, en uno de sus últimos años de vida, para ver el derby vasco. Jamás olvidaré aquel viaje fascinante dónde pude conocer las entrañas de ese magnífico lugar, ese magnífico estadio y, por supuesto, ese magnífico club como es el Athletic de Bilbao. También fui a mi primer clásico, algo que quería hacer antes de morirme a toda costa. El Madrid - Barça de la ida de la Supercopa de España fue espectacular: Dos a dos, con muchas ocasiones y una alta superioridad del conjunto blanco. Pero lo mejor fue la afición. Hacía tiempo que no vivía un partido en el Bernabéu con todo el estadio vitoreando casi al unísono alzando banderas blancas. Se me pusieron los pelos como escarpias.


Y por último, no hay que olvidar la mayor experiencia de todas: mis inicios en la radio. Casi no podía creérmelo cuando vi en el correo que nos habían aceptado el programa ¡Córrete la Banda! en Radio UMH. Todos los lunes, con los nervios del primer día, hablamos del deporte nacional, hacemos entrevistas, leemos cartas y sobre todo, recibimos felicitaciones. La sensación de ponerte unos cascos en esa cabina y hablar sobre lo que te pareció el partido en un debate, o hablar con el mismísimo Rubén Uría, no tiene precio. Y eso es lo máximo que me puedo llevar de este fantástico año. Espero que el año que viene sea, por lo menos, tan grande como lo ha sido 2011. ¡Feliz Navidad y próspero año 2012!